Las agresiones sexuales aumentan en Angulema, y la policía sigue sin poder encontrar al autor. A veces actúan de noche, otras en pleno día. La policía ha instalado cámaras de vigilancia por toda la ciudad, por lo que el autor opera ahora en la campiña charentaise... Y ese día, convencerá a un joven para que le siga hasta un matorral y le incitará a bombearle y follarle, hasta que el zumo fluya... Luego dejará a su víctima, huyendo...